“Una” de mis pilares.

Porque simplemente es como dice el título un pilar fundamental en todo este proceso de mi vida, y sin pensarlo dos veces dedico todo mis logros a ella, quien con esfuerzo tomo la responsabilidad de tener un hijo a distancia, por que desde allá lejos, hace todo por salir adelante y lo comparte con sus seres más queridos.

“Una mujer con determinación le dio a mi vida dirección”, así como dice esta pequeña parte de una música, ella es la más poderosa en mi formación tanto personal, académico y por sobre todo familiar. Con ella aprendí a valorar todo lo que se llama sacrificio y lucha constante hacia la superación.

Nunca faltan los consejos, los análisis más detallistas para aceptar las propuestas y opciones que surgen al paso, los proyectos a corto y largo plazo, las simples y sencillas llamadas telefónicas para saber las novedades del mes, los intercambios de mensajes por correo electrónico para estar al tanto de los hechos que a diario suceden, las emocionantes celebraciones con logros obtenidos, los meticulosos desgloses de la vida.

A pesar de la distancia, se siente ese apoyo que a diario fortalece como si estuviera tan cerca, como si todos los días al salir el sol, fuera la primera al ver y la última cuando ya estas rendido y solo tienes ganas de ir a la cama.

Cómo no tener en cuenta, los mínimos aspectos que disfrutas, las grandes emociones que te causan las pequeñas cosas que alegran el corazón. Del itinerario de debes seguir para llegar y ser feliz con los tuyos.

Una grande, que a su paso ha enseñado todo cuanto sabe para ayudar al crecimiento de su gente. Una grande, que comparte y no es mezquina con los que cree saben aprovechar para llegar a un objetivo. Y una grande que es mamá, tía y madrina al mismo tiempo.

Es por eso que agrego a este espacio considerando como un pequeño gran detalle de la vida, porque siempre tenemos un pilar que nos sostiene, al que aferrarnos, un pilar que nos levanta cada día, que nos da fuerzas y nos inspira para seguir.